i. Armonía
Si tomamos cualquier diccionario o enciclopedia podemos encontrar varias acepciones del término "armonía". Entre ellas figuran varias que se dedican exclusivamente a la música: "... arte de formar y enlazar los acordes musicales" [1] y es probable que podamos establecer una conexión entre el color y la música, partiendo de la siguiente premisa: "...3. Belleza resultante de la adecuada combinación de los elementos de un todo (...). [2]En cuanto al color, sería muy precipitado establecer una normativa científica o empírica acerca de esta "adecuada combinación de los elementos". Aún así, algunos autores (como Goethe, Runge, Ostwald y más recientemente hasta el mismo Küppers) se han dedicado al establecimiento de reglas que orientan la acción conjunta de los colores, por medio de distintos criterios. Pero esta variedad de posiciones (la mayoría de las veces válidas y con sólidos argumentos) es la que ha impedido establecer las leyes de la armonía cromática. Nos queda a nosotros sensibilizar nuestros conocimientos acerca del color y establecer los parámetros válidos de sensaciones e interacción entre ellos, bajo el concepto amplio de belleza, combinación y orden de los elementos.
ii. Contraste
Ahora bien, al hablar de contraste, no necesariamente hablamos de ausencia de armonía, o viceversa. Aunque es más fácil establecer los dominios del contraste en cuanto al color, este podría a su vez combinarse con una armonía o sencillamente ser un contraste PER SE.
[1] Diccionario Enciclopédico Ilustrado. P.132 21
[2] Ibíd., p.132
Si tomamos cualquier diccionario o enciclopedia podemos encontrar varias acepciones del término "armonía". Entre ellas figuran varias que se dedican exclusivamente a la música: "... arte de formar y enlazar los acordes musicales" [1] y es probable que podamos establecer una conexión entre el color y la música, partiendo de la siguiente premisa: "...3. Belleza resultante de la adecuada combinación de los elementos de un todo (...). [2]En cuanto al color, sería muy precipitado establecer una normativa científica o empírica acerca de esta "adecuada combinación de los elementos". Aún así, algunos autores (como Goethe, Runge, Ostwald y más recientemente hasta el mismo Küppers) se han dedicado al establecimiento de reglas que orientan la acción conjunta de los colores, por medio de distintos criterios. Pero esta variedad de posiciones (la mayoría de las veces válidas y con sólidos argumentos) es la que ha impedido establecer las leyes de la armonía cromática. Nos queda a nosotros sensibilizar nuestros conocimientos acerca del color y establecer los parámetros válidos de sensaciones e interacción entre ellos, bajo el concepto amplio de belleza, combinación y orden de los elementos.
ii. Contraste
Ahora bien, al hablar de contraste, no necesariamente hablamos de ausencia de armonía, o viceversa. Aunque es más fácil establecer los dominios del contraste en cuanto al color, este podría a su vez combinarse con una armonía o sencillamente ser un contraste PER SE.
[1] Diccionario Enciclopédico Ilustrado. P.132 21
[2] Ibíd., p.132
1 comentario:
grasias a esto que es fabuloso pude concluir una investigacion
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